Exámenes

Llega una época difícil para lo estudiantes, para los de más edad llena de alguna que otra noche en vela a base de café, coca cola, agobios, plannings, sí son ellos, los exámenes, pruebas decisivas en las que deben demostrar si se ha aprendido o no. 

En mi opinión los exámenes, ese juicio final, deberían suprimirse. En primer lugar por el estado en el que entran muchos niños al llegar esta temporada: dolores de barriga, inapetencia, imsomnio, nervios...no creo que esté decidiendo nada del otro mundo, entrando en un estado de estrés absoluto. 

En segundo lugar, nunca se tiene en cuenta aquellas personas que les cuesta más estudiar, y es que profesores, casi nadie estudia a diario aunque nos los repitaís diariamente, la razón es por la cantidad de actividades que se deben realizar de cada una de las asignaturas. Por este motivo cuando nos dejáis de mandar esos famosos "deberes" es cuando tenemos tiempo para estudiar, y sucede que hay personas que tardan más que otras en comprender, por ello deben echar el doble del tiempo de aquella persona que le dice "pues yo me estudie eso en 30 minutos", que perdónenme que les diga, comentarios de tal índole podrían ser ahorrados porque se machaca más a la persona e indirectamente les estáis diciendo que sois más listos que ellos. Y ¿por qué?, porque los exámenes no son más que una competición que nos inculcáis y que nunca dejará de haberla hasta que no los quitéis. Todos deseamos saber las notas del resto de la clase para ponerles en una posición de "listo", "normal" o persona que no estudia, porque obviamente descartamos de nuestra cabeza que esa persona haya podido invertir el doble de tiempo de aquel que llamamos "listo" y simplemente no sea capaz de llevar a cabo un examen en 60 minutos, quizás necesite más para pensar y redactar, o se ponga tan nervioso que no sea capaz de pensar.

Y para colmo como si no hubiésemos tenido suficiente, tenemos que sufrir los globales, estudiarte el libro  entero aunque ya te hayas examinado de cada parte del libro cada trimestre. Con sólo 12 años en pleno junio a una semana de las vacaciones y con un sol fabuloso tienes que repasar todas las lecciones del libro, sigo sin verle sentido sinceramente. Lo peor es que muchos profesores se justifican con "no hace falta que estudiéis, sólo repasar", a ver, las personas a la hora de enfrentarse a un examen tienen miedo al fracaso, producido por los calificativos que se les atribuyen a estas personas como he comentado, por eso nos aferramos a la memoria y a invertir tiempo, dudo que muchas de las personas hayan ido a los globales leyéndose sólo el libro.

Haciendo referencia a los famosos deberes, en ocasiones se mandan un número demasiado elevado para niños tan pequeños. Ya que son tantos, ¿no serían ya suficientemente razón para saber si se ha aprendido? Cuando se realizan el alumno tiene que buscar información, indagar y así va su proceso de aprendizaje que es demostrado en cada una de las actividades con sus soluciones. Pero si no se fían de esos deberes porque la solución viene en la página de al lado, elaboren sus propias actividades con las que estén seguros que van a aprender.

Y es que hay más posibilidades de evaluar, constantemente el profesor puede abrir un debate sobre el tema que se ha explicado, que me parece realmente fantástico porque a la vez se forma un criterio si se ha entendido y para las personas que aún no les ha quedado claro les ayuda a comprenderlo. Dejar que sean ellos quienes expliquen con sus palabras el tema que ha sido explicado apoyándose en los recursos que él crea pertinentes...Un sinfín de maneras de evaluar como alternativa a los exámenes. Claro, entiendo que se quiera evaluar la expresión escrita, bien, que cojan un tema que realmente les motive y les interese y lo redacten, puede ser una manera.

Los exámenes según mi opinión, es estandarizar a los niños, fomentar la competición y a la vez, obviamente, de no inculcar la cooperación, sentimiento de grupo y solidaridad, eso sí, siempre queremos inculcar valores. No se valora el esfuerzo diario, simplemente las respuestas de esos exámenes con un número que te indica en qué posición estás.